Hoy día me levanté a las 8.50. Me cambié y alisté, y me conecté puntualmente a la clase.
Primeramente, hablamos entre nosotros mientras esperábamos a que se conecten todos. Aprovechamos para comentar cómo nos estaba yendo en el curso.
Para mí fue algo totalmente nuevo, ya que no estoy acostumbrada a realizar estas rutinas. En un inicio, se me hacía un poco raro, incluso incómodo, pero me estoy aclimatando poco a poco.
Después, nos dividimos en grupos para realizar el check-in. Ahí, seguimos compartiendo nuestras experiencias con el curso y aprovechamos para hablar de la bitácora.
En esta oportunidad, pudimos platicar de todo. Desde trabajos pendientes hasta la importancia de usar bloqueador. Me gustó bastante, porque pude descubrir cosas nuevas sobre mis compañeras y escuchar sus experiencias con problemas a los que yo también me he enfrentado.
Luego de un largo rato, volvimos a la sesión principal. Ahí, realizamos un ejercicio de auto-conexión.
Esta actividad me gusta bastante, porque me permite conectar todo mi cuerpo (desde la mente hasta el corazón). Además, siempre sirve para relajarme sin perder mi nivel de atención (diría, incluso, que la incrementa).
Una vez terminamos eso, compartimos nuestras experiencias en los grupos que nos habían tocado. Mis compañeras Farah, Andrea y yo dijimos que tuvimos una experiencia muy satisfactoria. Me encantó trabajar con ellas, porque son súper pilas y divertidas.
Ana María nos mostró un video de otro grupo y, tras unas palabras de cierre, terminamos la clase.
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